Inscripción: 11ª Sesión del Comité del Patrimonio Mundial. París, 7 de diciembre, 1987.
El Parque Nacional del Manu está ubicado entre las Regiones Madre de Dios y Cusco, punto de encuentro de los Andes Tropicales y la cuenca del Amazonas en el suroeste del Perú. Es una de las reservas naturales más importantes de la región amazónica, con más de 1,000,000 de hectáreas de extensión y una diversidad biológica relevante que se desarrolla entre los 150 y 4,100 msnm.
Aquí coexisten miles de variedades de plantas, especies de aves, mamíferos, anfibios, insectos y especies raras; por esta razón el Manu se ha convertido en un lugar de investigación y estudio para científicos de todo el mundo.
Se trata de una cuenca hidrográfica extensa, geográfica y económicamente aislada, difícil de acceder y que por ello no ha sufrido mayores impactos humanos. Alimentado por numerosos arroyos de las montañas, el río Manu avanza a través de los bosques de tierras bajas antes de unirse al río Madre de Dios en el extremo sur.
Como lo demuestran las ruinas y petroglifos incaicos y preincaicos, existe una larga historia de presencia humana. La leyenda de Paititi, que según las crónicas y leyendas habría sido una ciudad Inca escondida en alguna parte de la selva amazónica peruana, ha atraído a investigadores y aventureros.
El Parque Nacional del Manu posee una amplia gama de condiciones ecológicas y evolución de numerosas especies y comunidades (Criterio (ix)). La diversidad de plantas oscila entre 2,000 y 5,000 especies distribuidas en diversos ecosistemas, hábitats y nichos. Más de 200 especies de mamíferos, 800 especies de aves, 68 especies de reptiles, especies raras como el armadillo gigante, 77 especies de anfibios y una impresionante cantidad de peces de agua dulce. Más de 1,300 especies registradas de mariposas, insectos y cientos de especies arbóreas ya identificadas (Criterio (x)).
Integridad. La propiedad se beneficia de una protección natural debido a su ubicación y se considera una de las áreas primigenias de la Amazonía peruana. Está integrada en un complejo de conservación compuesto por diferentes categorías de áreas protegidas y áreas comunales indígenas, incluyendo el Parque Nacional Alto Purús y el Santuario Nacional Megantoni. Hay corredores funcionales que se extienden hasta la Amazonía brasileña y boliviana. El uso humano directo y la interferencia son mínimos y se limitan a un pequeño número de residentes indígenas.
Requisitos de protección y gestión. El aislamiento geográfico y la protección han favorecido al Parque Nacional Manu, en comparación con los cambios que se han producido en otras regiones de la Amazonía peruana. La historia formal de conservación empezó en 1968, cuando se declaró la Reserva Natural Manu. En 1977, el Parque Nacional Manu fue reconocido por la UNESCO como la zona núcleo de una reserva de biosfera aún mayor.
Tanto el parque nacional como la reserva de la biosfera están bajo la autoridad del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (SERNANP), que depende del Ministerio de Medio Ambiente. El parque posee varias zonas: la más grande es la Zona Restringida, principalmente de bosques no intervenidos y dedicada a la conservación con acceso restringido para los investigadores; y las más pequeñas son la Zona de Uso Especial y la Zona de Servicio alrededor de la Estación Biológica Cocha Cashu. También hay dos Zonas Recreativas, una Zona Cultural y una Zona de Recuperación que cubre áreas andinas afectadas por el ganado y el uso relacionado con el fuego.
Tanto las comunidades agrícolas como los residentes indígenas tienen un impacto localizado pero manejable. Sin embargo, existe preocupación ante la construcción de nuevos caminos a través de los Andes y por el impacto de la explotación del yacimiento de gas de Camisea.